Sydney 11 Abril 2011



Aeropuerto Internacional de Sydney

Ya estamos en Australia, Sydney. Después de 8 horas de vuelo, dónde nos hemos puesto de comer hasta no poder más, ver alguna película y sólo dormir un par de horas, nos vemos en la puerta del aeropuerto rumbo hacia la casa dónde nos alojarán amablemente una pareja natural de Melbourne, Kade y Emily. Hemos conseguido gratuitamente el alojamiento por medio de la página web www.CouchSurfing.com, dónde puedes registrarte y entrar en una gran comunidad alrededor de todo el mundo y compartir tu sofá y que los demás lo hagan contigo, algo de gran utilidad cuando estás viajando por un largo período de tiempo y quieres ahorrar algo de dinero, conocer gente local y compartir experiencias. Es la primera vez que hacemos esto, así que estamos muy intrigados por ver que tal son nuestros caseros y vivir otra nueva experiencia de la mejor manera posible.

Tomamos un taxi hacia Lusty Street, ubicada en el barrio Wolli Creek, sólo nos lleva unos diez minutos y un coste de 13 dólares australianos. Estamos en la puerta del conjunto de apartamentos, contactamos con Kade y Emily, nos están esperando. El encuentro ha sido muy cálido, se han levantado algo más temprano de la cuenta para recibirnos, en una hora se marchan a trabajar. Después de una pequeña charla, nos explican un poco como utilizar algunas cosas y nos dejan una llave para que podamos tener total libertad de entrada y salida. Nuestra primera impresión ha sido muy buena, nos han encantado. Una vez solos en casa, María no ha podido evitar echarse una pequeña siesta a las 8 de la mañana, estamos muertos.

Sobre las 11:00 am salimos hacia el centro, hemos quedado con nuestro amigo Yves, nos vamos a reencontrar en Australia después de habernos visto en Koh Tao. Nos dirigimos hacia Circular Quay, dónde está ubicado la famosa Opera House y el Sydney Harbour Bridge ( Puente Sydney Harbour). Allí hemos quedado en el embarcadero número 6 sobre las una de la tarde. Primero queremos parar en George Street para registrarme en Medicare y poder tener asistencia gratuita médica, ya que, a la bajada para aterrizar, me ha vuelto a doler los oídos y el dolor no ha cesado, con lo que necesito ir de nuevo a que me echen un vistazo. Yo me quedo una parada antes que María y me reúno con ellos un poco más tarde, y al bajarse María del tren se da cuenta de que se lleva los dos tickets con ella, nooooooo!!! Nuestra cara es de cómo podemos cagarla así nada más llegar aquí jejejeje. Así que a ver como le explico yo a los encargados de comprobar a la salida del tren si tienes o no el ticket, y se tendré mi correspondiente multa por no tenerlo. Allá voy, hay unos cuántos lugares por dónde salir, echo un vistazo y ve que en uno de ellos no hay nadie, y por suerte una de las puertas abiertas, así que me lanzo y consigo pasar sin ser detectado, bufffffff!!!!! Que alivio!!!! Consigo dar con Medicare e intento registrarme, misión fallida, necesito un papel que está en casa. Mañana lo intentaré de nuevo.

Me reúno con María e Yves, vaya alegría de ver al Preziosoooooo!!! Charlamos durante un rato y nos vamos a comer algo al MacDonalds, sitio que creo que vamos a visitar muy a menudo en nuestra estancia en Australia.

Sydney Harbour Brigde

Empezamos nuestra ruta, nos vamos hacia el Sydney Harbour Brigde, para poder disfrutar de unas vistas de la Opera House y de la bahía. Mientras caminamos hacia el puente, disfrutamos en todo momento de las vistas, todo lleno de gente caminando, gente tomando el sol en las zonas verdes, gente tocando en la calle, etc. Nuestra primera impresión es genial. Desde el puente tienes unas vistas privilegiadas gratuitamente, si quieres pagar algo más de dinero puedes subir a una de las torres situada en la mitad del puente, por un coste de 9.50 dólores australianos. Nosotros hemos disfrutado mucho desde abajo jejejejejjee.

Paseo hacia Sydney Harbour Brigde

Circular Quay

Sydney Harbour Brigde

Opera House

Opera House

Sydney Harbour Brigde

Opera House

Opera House y Circular Quay

Vistas desde Sydney Harbour Brigde

Vistas Circular Quay

Entrada Opera House

Hacemos el camino de vuelta y nos dirigimos hacia la Opera House, caminando tranquilamente y charlando con Yves, tantas cosas que contarnos. El ambiente que se respira es de tranquilidad, durante el paseo no hemos visto a nadie que vaya con prisas, todo el mundo muy correcto, y para ser una ciudad tan grande nos ha sorprendido mucho. Ya en la puerta de la Opera House, hemos tomado algunas fotos y admirado su belleza, algo curioso es que viéndola a distancia, parece que todo está unido, pero no, cada sala es un edificio separado. Otra cosa que nos ha sorprendido es que nos la esperábamos más grande, al verla anteriormente en televisión parecía como algo más grandioso, aunque lo es evidentemente por su belleza, pero en la realidad es algo más pequeña.

Última visita al Botanic Garden, justo al lado de la Opera House. Todo está muy bien cuidado, la variedad de plantas no es gran cosa, nada que ver por ejemplo con el Botanic Garden de Edimburgo, pero la situación es magnífica, vistas a la bahía y al centro de la ciudad. Algo curioso es que hemos podido compartir un rato con un montón de loros, todos ellos alrededor de la gente esperando o incluso demandando algo de comer, unas bolitas que puedes coger de los árboles cercanos y ofrecérselas.

Botanic Garden (Yves)

En compañía de estas peculiares cacatuas

Botanic Garden

Volvemos a casa pronto, Kade y Emily nos van a preparar la cena. Hemos comido un arroz con algo de especies indias muy rico, y hemos compartido un buen rato de charla contando anécdotas de cada uno vividas en India, que no son pocas, vaya risas nos hemos echado. Les agradecemos mucho el esfuerzo por complacernos y hacernos sentir como en casa. Thanks guys!!!!!!